El templo de Ramsés II está excavado en la roca al igual que el de su esposa Nefertari, pero este es mucho más imponente, la principal visita para hacer en Abu Simbel. Deslumbran los colosos tallados en la entrada. El templo se sumerge 61 metros al interior de la montaña.

Estuvo dedicado a Amón-Ra de Tebas y a Ra-Harajte; pero también fueron venerados Ptah de Menfis y el propio Ramsés II.

Características del gran templo de Abu Simbel

La fachada

Detiene todas las miradas. Sorprenden sus 33 metros de altura por 38 metros de ancho, pero sobre todo llaman la atención los cuatro colosos de Ramsés II. Tienen 20 metros de alto. Las cuatro estatuas representan al rey sentado sobre su trono. Cada una lleva sobre la cabeza la doble corona del Alto y Bajo Egipto, y la cobra Uraeus, símbolo de la realeza.

El coloso mejor conservado es el primero del lado izquierdo, mientras que la cabeza y el cuerpo del segundo están caídos, a causa de un terremoto durante la época faraónica. El tercer coloso fue restaurado por orden de Seti II, quien sujetó el brazo derecho con pequeños bloques de piedra todavía visibles.

La espectacularidad de estas estatuas me obliga a detallar sus medidas: la anchura de oreja a oreja es de 4,17 metros; la boca, de 1,10 metros; la nariz, de 0,98 metros; las orejas, de 1,05 metros;  la frente, de 0,59 metros.

Entre las piernas de los colosos hay unas estatuillas pertenecientes a la familia real; corresponden a la madre de Ramsés II (la reina Tiy), su esposa Nefertari, la princesa Meritamón, el príncipe Ramessu y a otro alto príncipe.

Sobre las piernas de las estatuas del lado sur verás inscripciones griegas, y otras que dejaron los antiguos viajeros. Las más llamativas son obra de los mercenarios enviados por Psamético II desde el interior de Nubia y Elefantina.

En la parte superior de la fachada hay una fila de 22 mandriles (babuinos) celebrando la salida del sol.

En el lado sur de la rampa de acceso, un relieve grabado en el año 34 del reinado de Ramsés II conmemora su matrimonio con la hija del rey de los hititas. El rey está sentado entre dos dioses y recibe al mismo tiempo el homenaje del príncipe hitita y de su padre.

En el lado norte, unida a la rampa por unos escalones, se alza una capilla consagrada por Ramsés II al culto del sol. Fue descubierta por Barsanti durante la restauración de Abu Simbel en 1910. A la izquierda de la entrada, una roca tallada muestra al rey ofreciendo incienso a Amón-Ra, Mut, Ra-Harajte, Set y al asiático Astarte. Es el preámbulo del acceso al santuario.

La sala hipóstila

Fíjate en la llave incrustada en la puerta de entrada: tiene la misma forma que la llave de la vida de los antiguos egipcios.

Esta sala es de 16,5 metros de ancho por 17,5 metros de largo. El techo está soportado por ocho pilares de 9,15 metros de altura, en los que el rey está representado con la forma del dios Osiris.

Los pilares del lado derecho llevan la doble corona del Alto y Bajo Egipto, mientras que los de la izquierda solo tienen la corona del Alto Egipto.

El techo está decorado con buitres y textos reales.

En la pared este, a la izquierda, varios relieves representan a Amón-Ra junto a los hijos de Ramsés II, mientras que a la derecha aparece Ra-Harajte y las hijas del rey.

Los relieves más importantes se pueden ver en la pared norte: se recrea la famosa batalla de Qadesh, en la que Ramsés II luchó contra los hititas. El rey aparece en su carro, rodeado por el ejército enemigo.

Recordando la construcción de un templo en Menfis en honor del dios Path, ocho salas se añaden a la sala hipóstila. Eran utilizadas para el almacenamiento de los objetos de culto y no tienen la decoración completamente terminada.

La segunda sala hipóstila

Es una continuación de la anterior. Esta pequeña sala consta de 11 metros de ancho por 7,60 metros de largo. El techo está soportado por cuatro columnas con relieves.

En la pared norte y sur se halla el rey, levantado sobre las espaldas de los sacerdotes, junto a la reina Nefertari. Enfrente, esperándolos, está el barco sagrado de Amón para llevarlos al más allá.

Sobre la pared trasera del lado norte, se lo ve al rey venerando a Harajte; en la del lado sur venera a Amón-Ra.

El vestíbulo

La siguiente sala a visitar en el templo de Ramsés II es el pronaos o vestíbulo. La cámara mide 11,25 metros de longitud por 7,75 metros de ancho. La sostienen cuatro pilares cuadrados sobre los que aparece el rey al lado de los dioses Mut, Hathor, Satis y Ankis.

Sobre la pared del fondo, tres puertas llevan a otra sala, decorada exactamente igual que la precedente. De esta derivan otras tres puertas.

El santuario

Al fondo del gran templo de Egipto se ubica el santuario. En el centro se halla el soporte de la barca solar y detrás aparecen sentados los dioses Ptah, Amón y Ra-Harajte junto a Ramsés II.

Estas estatuas fueron colocadas estratégicamente: los rayos del sol las iluminan dos veces al año, a todas menos a la del dios Ptah, ya que pertenece al mundo subterráneo. ¿Cuándo ocurre esto? El 22 de octubre, que es el día en que nació Ramsés II, y el 22 de febrero, día de su coronación como faraón.

Cuando hubo que trasladar el templo a causa de la construcción de la presa de Asuán, los ingenieros modernos no conseguían hacer coincidir su orientación para que el fenómeno se produjera en las mismas fechas. Al final lo lograron, solo que un día después: 23 de octubre y 23 de febrero.

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