¿Hay que vacunarse para ir a Egipto? No hay vacunas obligatorias para Egipto, esto en primer punto. El Ministerio de Sanidad sólo exige la vacuna contra la fiebre amarilla a las personas procedentes de países endémicos.
Sin embargo, hay vacunas recomendadas: Hepatitis A, Tétanos y Triple Vírica (sarampión, paperas y rubéola).
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Otras vacunas para el viaje a Egipto
Si eres de los que comen en puestos callejeros, o tienes pensado hacer un viaje completo desde el Alto Egipto hasta Alejandría, o consideras viajar en crucero por el Nilo (de las mejores cosas que puedes hacer en Egipto), te sugiero aplicarte la vacuna contra la fiebre tifoidea. ¿Cómo se contagia?
- Por la ingestión de comidas o bebidas manipuladas por un portador asintomático.
- Por usar un retrete contaminado y no lavarse las manos después de usarlo.
- A través de agua contaminada y comidas frías mal lavadas.
Por otro lado, dada la proliferación del coronavirus, la Asociación Española de Vacunología recomienda vacunarse contra la gripe.
Para viajar con animales, el único documento necesario es un certificado de vacunación.
Necesidad de un seguro médico
Egipto no tiene acuerdos de asistencia sanitaria con Egipto o América Latina, así que asegúrate de llevar un seguro médico.
El seguro médico te garantiza una cobertura para ir a un hospital o clínica privada en caso de urgencia. Hay distintos planes. Es conveniente contratar uno que incluya repatriación. Las posibilidades son ínfimas, pero con estos temas es mejor pecar de precavido.
Botiquín para Egipto
Te aconsejo llevar un pequeño botiquín que incluya pastillas antidiarreicas, pomadas nasales (es normal que se reseque la nariz, sobre todo en el desierto) y cremas contra las picaduras (en algunas zonas los mosquitos son un infierno).
Si ya estás cargando demasiada ropa en la maleta (mira qué ropa llevar a Egipto), no te preocupes que en cualquier farmacia encuentras estos productos.
Enfermedades comunes
Entre las enfermedades más comunes están los siempre fastidiosos problemas estomacales, que afectan a muchos viajeros. En realidad no se sabe a ciencia cierta de dónde proceden; suelen aparecer en los cruceros de lujo del Alto Egipto y se cree que es debido a la acumulación de cansancio, insolación, cambio de agua, comidas, etc.
Lo más recomendable para prevenirlas es beber agua mineral embotellada, no abusar de bebidas frías al regresar de las excursiones (es preferible tomar un té caliente), pelar y lavar bien las verduras y frutas, y no excederse con los refrescos ni las especias en las comidas.
Una enfermedad complicada es la hepatitis, para la que apenas hay remedio antes de ser contraída.
Y una de las más peligrosas es la bilharziosis, aunque esta sí se puede evitar: no te bañes en el río ni en canales, mucho menos en zonas de agua estancada.
Los parásitos se introducen a través de los vasos sanguíneos de la piel y desovan en el interior del organismo. Al cantante egipcio Abd El Halim Hafez le produjo la muerte.
Aunque las farmacias (saydaliya, en árabe) pueden sacarte de un primer apuro, te recomiendo evitar el hospital estatal. Si en El Cairo ya es deficiente, imagina fuera de la capital. Carecen de higiene y tienen un aspecto, tanto interior como exterior, realmente lamentable.
No obstante, existen hospitales privados con los últimos adelantos médicos y con una atención excepcional. La mayor parte de estos médicos estudió en el extranjero.